domingo, 6 de mayo de 2012

MOON SHINE

MOON SHINE
Por Víctor Corcuera Cueva


Desde siempre, la humanidad, ha tenido esa sensibilidad de apreciar los fenómenos estelares, no en vano la cosmovisión está plasmada en las manifestaciones culturales ancestrales. Quizás, en estas últimas décadas estamos alejándonos, o estamos bloqueando tal vez nuestra sensibilidad orgánica de observar lo que llamamos “naturaleza”. Tanto así que cuando tenemos tierra entre las uñas, se dice que estamos “sucios”, que debemos lavarnos. Suelo tener tierra entre las uñas, en los últimos 06 años estoy sumergido en la maravillosa vida de las plantas. La tierra, la madre de todas las madres, fue sagrada para nuestros ancestros, pues sin ella, sus vidas no habrían tenido sentido ni existencia. En otros tiempos, en diferentes partes del planeta, los hombres se servían de los movimientos de los astros para medir sus tiempos ligados a la agricultura y otras actividades económicas.

La luna, como otros astros, fue también inspiración de creaciones artísticas. ¡Que hermosa es la luna vista desde la tierra! Tímida aparece sonriendo y se desplaza  hasta  estár llena de alegría, vida y luz. Su plenitud no solo nos asombra a nosotros- los seres “racionales”- sino también, a las hermosas y bellas plantas, que mediante sus flores la saludan erguidas con colores de una sola nación: la tierra. La Muchic, Bolita y Miga (mis gatas) también suspiran ante la luna, pero no sé si en realidad la miran o maquinan como comerse al conejo que esta dibujado en ella, en fin, las tres en fila mirandola están.

Las noticias anunciaban que el 5 de mayo, por única vez en el presente año, la luna daría un súper brillo y se vería más grande de lo habitual. No había planeado ni caminata ni campamento, pero esta oportunidad de espectáculo cósmico, asumí que tenía que apreciarlo desde un lugar no tan urbano. Es así que para disfrutarla, conjuntamente con Inticha y Celso, decidimos hacer una fogatita, allá en la tierra prometida, en Huanchaco. Mi hermano toco melodías andinas con su quena, mientras el fuego crujía bajo la luz de la luna. Las melodías de la quena, el sonido del mar y del fuego, fusionados, se elevaron para susurrarle. Las estrellas titilaban coquetas en el firmamento, mientras que las nubes armaban el juego de las escondidas de los astros.

La luna, en todas sus fases es digna de apreciarla, tenemos la suerte de poder ver. ¿Qué diferente seria si nuestras vistas fueran opacas, di? Gracias vida.

Trujillo, el 06 de mayo del 2012.

Cordialmente:
Víctor Corcuera Cueva.

A continuación algunas imágenes de anoche.
 Emergiendo detrás de las montañas.
 El fuego crujiendo, despertando a las estrellas.
 Colorada y resplandeciente.
 Doña palmera la saluda también.
 Inticha se encarga de matizar el fuego.
 Concierto a la luna.
¡Gracias Celso!
Víctor Corcuera Cueva

2 comentarios:

Anónimo dijo...

que lindo Victor!! una apreciacion maravillosa y agradecimiento!!!
cuidemos a nuestra pacha mama que como la tratemos nos tratara!... luna de mis ojos! JP

Víctor Corcuera Cueva dijo...

Un placer JP!
Hasta entonces.
VCC